Vuelo bajo

Vuelo bajo, me aferro
A todo aquello que es de ti,
A todo lo que es suspiro y que me robas.
Tiene tu nombre
Y tu razón de vivir.

Vuelve, vuelve y repite tu nombre,
Grítalo, como quien grita inmensamente
El dolor que se hunde en el pecho.
En el alma quebrada
Quedan huellas de tus pies.
Te persigo, pero es un sueño,
Un dulce sueño tintado de rojo carmesí.

Tiembla la noche al verte pasar,
Un eco distante, un murmullo fugaz.
En la penumbra encuentro tus ojos,
Dos estrellas que guían mi andar.
Pero el abismo se alza, cruel y profundo,
Y el aire se llena de tu ausencia brutal.

Quiero tocarte, aunque sea un segundo,
Sentir tu latido como un vendaval.
Mas me hundo en sombras,
En un cielo sin luna,
Donde tu nombre es mi único hogar.

May Hernández

Créditos al creador de la imagen.